viernes, 8 de junio de 2012

Se avecinan cambios

En casa hará cosa de un año que empezamos a tontear con la verdura y la fruta ecológica, de vez en cuando pedíamos una caja y disfrutábamos del sabor estupendo de los alimentos de temporada. Poco a poco se ha instaurado en casa que todos aquellas frutas y vegetales que entren por la puerta lo hagan sin nada de pesticidas, que no sean transgénicos y que no hayan viajado por medio mundo para llegar hasta nuestro frigorífico (cosa que me parece de sentido común).

El cambio también lo hemos iniciado con los lácteos. La leche es de vacas que no están hinchadas a antibióticos y que comen pasto, ni soja, ni maíz (obviamente también trans) o trozos de compañeras suyas, que hubo una época en que el canibalismo se puso de moda entre las rumiantes, ya que a sus señores ganaderos les salía más barato darle harina animal (aggggghhhh que asco!) que pasto verde del prado. Nos compramos una yogurtera y con un yogur bio y 1 litro de leche bio obtenemos 6 yogures buenisssimos...ja! me río yo de la danone.

Poco a poco queremos instaurar el cambió con los cereales y las pastas...El gran reto del cambio esta en la carne, demasiado cara para una familia de 4, el tema de la carne da para otra entrada.

Para mucha gente toda esta historia de los productos ecológicos no tiene mucho sentido, lo ve como algo "snob".  Yo no tengo que justificar el porqué de estos cambios, ya que cada uno es libre de comer lo que quiera, pero sí que quiero compartir estos documentales que quizás nos han ayudado a abrir un poco los ojos.

 "Nuestros hijos nos acusarán" de Jean-Paul Jaud


o "Food Inc" de Robert Kenner



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